Promete que en una noche cualquiera, te aparecerás de entré las sombras invadiendo
El espacio infinito que conforman estas cuatro paredes de la desolada habitación, me invitarás a desatar la sagrada llama de la pasión
Hechiza la noche,
y empapa los cristales de la ventana con tu cálido suspiró
Mientras se humedecen al entrar en contacto con el vapor que desprenden nuestros cuerpos estelares, ella desgarra con sus manos el tejido de mi piel (alivia mis pesares)
Me atrinchero en su pecho
Desata su torso desnudo ante la mirada rojiza de los astros quedándose sin palabras.
Entre mis letras te fundes,
y naces de este oscuro espacio invisible como una luz la cual ampara la soledad de este cuarto.
Si compañía me ampara en este edén ese que siempre nos esperó.
Ásperos besos recorren su cuello hasta desatar el averno en su torso.
Y veo en sus ojos ese bello brilló el cual me hace palpitar mi alma siempre a escondidas por las noches de la mirada arcaica de la luna.
Asi dibujo en cada letra esa pasión que sólo por las noches me haces sentir.
Muere
este hombre cuando por mañanas desapareces sin más vacilación...
Y es así que nace el fuego de esta pasión el cuál nunca muere...