Tiempo de arrebatos,
trémulos besos de muerte,
bárbara cadena,
amargura que rebosa.
Sombrío mi pecho retorcido,
delirio vano como aguda espuela,
cruel estado este anhelar insano,
mísero secreto.
Álamos sin canto, pétalos dispersos,
a medida que el viento cruje la tierra
me consuela pensar en tu sonrisa
Insistente en los cristales arde mis llamas,
silencio donde la piedra se destroza,
mi rumbo a torcer alcanza.