AIRE LIBRE SIN DESVELOS
No estoy aquí por sabio ni erudito,
no me importa ser último o primero.
Si pasan una escoba o un plumero,
resisto, no me afecta ni me agito.
Solo estoy por si un árbitro a su pito
lo sopla resonando su garguero
para dar con un caño en el tintero
al corregir errores de un escrito.
No son noches de esfuerzo ni querellas,
ni me quita la calma a toda hora
para ver si ha subido o está sin huellas.
La vida está en la fauna, está en la flora;
no es pantalla en un cuarto sin estrellas.
Lamento si un encierro los devora.