Vendré de un pasado obscuro,
con las manos atadas por el tiempo,
del pozo olvidado llegaré como mil bacanales.
un coro de martillos traerá mi voz.
Mi alma volverá como el agua
aquella que vuelve desde el cielo a la tierra,
acaso el dolor y la muerte tienen la última palabra,
surcaré mi camino sobre los ángeles.
Vendré hundido entre juncales,
en andamios de los arrabales,
mi poesía saldrá dando gritos,
mis venas llegaran como ríos desbordados.
Para tener la vaga esperanza de seguir amándote
tendré la esencia de tu ser,
nos cruzaremos y nuestra historia empezará de nuevo
sentiré tu aliento renacido sobre las nubes.