Sigue la historia
que surge de la vida,
día tras día.
Y sé, en la misma,
el gran protagonista,
sin esconderte.
Serás noticia,
quizás para ti mismo,
y no te importe.
Mira los rasgos
escritos en el alma
para seguirlos.
No tengas miedo,
la vida es un conjunto
de sensaciones.
Buenas y malas,
serán, como el destino,
quien las ofrezca.
Puede que un día
te veas en un lago
con fondo azul.
También las llamas
y lavas de un volcán
te embriagarán.
Pero si quieres
la esencia de tu historia,
¡vive sin más...!
Rafael Sánchez Ortega ©
06/11/20
Cada persona tiene su propia historia y es la que va surgiendo cada día y cada minuto de ella. Seguirla y caminar por donde te lleve, incluso hacer los cambios que tú creas necesarios, es lo que importa. Así estarás escribiendo y personalizando tu propia vida y, quizás, llegues a conseguir y alcanzar esa esencia que ella guarda tan celosamente.