bonifacio

Eslabones destinados

Eslabones destinados
a la más inmensa tortura
todo bajo una pieza oscura
atados a una cintura
ardiendo de locura
aprisionando la opresión
bajo el esternón
aplastando la musculatura
agarrados sin desenfado circundando toda la figura
que anhela respirar exhalar
por último morir de contractura
pero no seguir así
darle un fin
un jazmín
un jardín
una humilde sepultura.

Eslabones destinados
a parir mordeduras
malvados
obsecados por herir
sin censura.

Sin discernir.