Erick Alexander Villegas

LA VIDA Y LA MUERTE

Muerte misteriosa eres,
no alcanzo a comprender tu proceder funesto,
ley de este mundo tridimensional de Euclides
burla de la suerte y del destino,
accidente inoportuno o vil descuido.

Querrás la vida con los vivos,
cuando ya no te verán,
evadirla no podrás,
la huesuda no burlaras.

Siento estremecer mi alma,
me encuentro en un tribunal
alguien saca un libro,
pienso no caigas de rodillas,
cuando la balanza aparezca,
la vara medirá y el libro leerá.


Un veredicto rotundo se escucha pronunciar,
los jueces del destino una condena dictar
pasaras al otro mundo, de este ya no serás.

Guaraña tenebrosa el hilo cortaras,
corrientes de energía al alma abaten,
y al cuerpo estremecen,
sueño de la conciencia más profundo,
repetición de sucesos de la vida monótona,
la fuerza lentamente perderás.

Fuego que te quema,
angustia que te ahoga,
ya no puedes respirar,
exhala el aliento, déjate llevar

Alma, ya alejada estas,
te llevaste todo lo que era,
como ajena estas,
no comprendes lo que pasa,
para dónde vas,
de este mundo ya no eres,
hacia luz vas.

Visitarás lugares que en el pasado preferías,
trabajo haces en un mundo inmaterial,
forjarás todo en su mente,
en tu mundo vivirás,
de este parte no serás más,
Ironía de la vida se tendría que acabar.

Túnel misterioso hacia dónde vas,
hasta la  luz celestial o al calor infernal,
voces espectrales llaman e invitan a quedar,
manos y brazos que me quieren atrapar.

Escaleras infinitas hacia arriba van,
sobre mi cuerpo floto,
no me lo puedo explicar,
cuerpo inerte que me vestiste,

te voy a extrañar,
las entrañas de la tierra te esperan ya,
los gusanos lentamente te comerán.


Rostros conocidos que de este mundo partieron,
me salen a encontrar,
un lugar maravilloso, un paraíso vegetal,
me he convencido que aquí es donde debo estar.