Parece casi mentira
si me pongo a trabajar
y la garganta se agita
por escribir sin parar
todas las cosas que digo
cuando me pongo a estudiar.
Parece casi mentira
cuando no puedo parar
de escribir desde el rincón
que me puedo regalar
cuando pienso solo en vos
si es que me pongo a estudiar.
Parece casi mentira,
nadie lo puede creer
la tinta casi está seca
y me pondría a escribir
las cosas que en mi cabeza
quisieran poder decir.
Parece casi mentira
que todavía esté acá,
que me guste tu presencia,
que me intrigue tu mirar,
que a veces digo las cosas
sin saber cómo empezar.