Madrigal de embelesos se posaron en tus labios,
un mangar de dulces besos…seductores,
boca roja tentadora… que provoca,
excitante… encantadora,
me he dejado conquistar de su talente…fascinante.
Escarlata tentación de blandas formas…
que dan ganas de probarlos,
un deseo incontenible de morderlos,
y degustar su sabor cautivante,
la dulzura apasionante que trastorna.
Me conformo con soñarlos,
me imagino la delicia de sentirlos,
y tan solo me contento con mirarlos.
Los invento entre suspiros,
y solo puedo suponer su exquisitez.
Ese néctar de sus besos…
convertido en imprudente excitación…
me estimula los sentidos,
me arrebata las ideas,
me acelera la pasión.
Humedecerlos…es un acto de crueldad,
no debía ser legal,
es un hecho de total provocación,
que podría terminar en obsesión.
Que impotencia siento ahora…
sin poder hacerlos míos.
Unas ganas reprimidas por besarlos,
y completar este vacío…
con este ímpetu de amarlos.