Él se quería ir
yo no lo quería soltar,
Lo encerré en el cuarto
le dije adiós mas no le quitaba
el cerrojo a la puerta
Hasta que un día
Lo hice y el me confesó su desdicha,
me rendí Y por fin se fue.
con el alma echa mil pedazos
y con el recuerdo en la mano
al fin sentí alivio.
más una parte de mi se desvanecía lentamente
Ya no hay pesadillas donde despertaba llorando
porque ya no estabas a mi lado
mas el miedo de olvidarte me sigue a todas partes
06/04/2021 Daniela Castillo Arguedas