𝗗𝗜𝗖𝗘 𝗔𝗠𝗢𝗥 . . .
Ella se viste de melancolía...
Y en su sentir
las estrellas no terminan de desperezarse
los sigilos anidan sin remedio.
Se agota la patria, el corazón, el pensamiento.
La esperanza duerme en su capa de cenizas.
Ahora ella me mira...
Y sus ojos son universo,
sol, amanecer, vertiente,
lengua de alma.
Me mira
y soy hielo, luego agua,
su más delicado licor,
su algarabía. Quisiera...
Ella al verme sonríe...
Y en sus comisuras
yacen mis razones,
mis rimas, mis poemas.
Ella sonríe y cura.
es milagro, un aliento manzano,
el valor de las dimensiones que ignoro.
Ella dice “amor”...
Y me divulga como soy,
construyo puentes,
jardines, usinas de dicha.
Me repliego en la causa,
en puertos de dulzura,
en donarme a su felicidad.
Ella, donde se baña
el día en mi pensar...
Anton.