La persona que cierra su memoria
a momentos amargos del pasado;
obtendría el regalo más preciado
de un paisaje glorioso de victoria.
El ganar la batalla a triste historia
deja dentro un sendero despejado;
donde nace un futuro acrisolado
que nos brinda de paz hermosa gloria.
¡Olvidar! Olvidar es gran remedio
a las penas que el mundo nos ofrece;
pues nos quita el terrible y cruel asedio
de la sombra que todo lo oscurece;
otorgándole al alma lindo predio
donde llanto y dolor desaparece.
Autor: Aníbal Rodríguez.