Es la herramienta infalible y esencial
Que pulveriza la fuerte roca
Es el arma poderosa
De la mujer guerrera que decide
Encomendar su existencia
Al poderoso en batalla
El mismo que libro a su pueblo
Del poderío infernal
Del Egipcio y sus arrogancias
Aquel que con sus acechanzas
Oprimió por muchos años a sus hijos
Sin contar que el Dios de lo imposible
Con su poder lo doblego
Conociendo que su furor
Fue impetuoso y temible
¡Bendita es y será la mujer¡
Que temprano busca a Dios en oración
Y con humildad pide protección
Para su parentela y su nación
Porque tiene la convicción
De que su oración es eficaz
La cobertura sobrenatural
Que cuida y protege al desvalido
Y le da fuerza al que ha creído
Que nada puede lograr
Sin contar que en la debilidad
Dios le da la victoria al que en él cree
Porque para él no ha imposible
Porque él tiene poder para ser visible
Aquello que tus ojos no pueden ver
¡Mientras mi Dios me de vida¡
Sigo encomendando a él mi oración
Y tengo la fe y la convicción
Que ella mueve su mano
La herramienta esencial del guerrero
Que afila día a día su armadura
Con la unción y la llenura
Que proviene de lo alto
La unción que no conoce barrera
Al pulverizar aquella piedra
Que coloca el hombre en el camino
Y quiso perjudicar al que Dios previno
Del mal antes de que llevara
Porque su vida está siempre resguardada
Bajo la sombra del altísimo
ENEIDA JOSEFINA BRAVO REALZA
POETISA DE JESUCRISTO
EL BAÚL-VENEZUELA
22-04-2.021
03:40 a.m