Las flores de mi ventana
son de color mermelada,
se visten de papel rosa
al empezar la mañana
y se acuestan primorosas
en caramelos de plata.
Las flores con que me adorno
viven en mi corazón,
son como papel de seda,
son de pasión y valor,
son de aromas de esperanza
si me abrazás con amor.
Caminando siempre sola
me acuerdo cada vez más
de los besos de aquel tiempo
que extraño cuando no estás,
mientras el río se aleja
sin poder volver atrás.