Camino por el sendero…
encuentro y corto dos lirios:
¿Y qué causa mis delirios?
¡La causal es que te quiero!
Pero yo amarte prefiero
aunque prime la distancia
el amor, dará constancia
y te seguiré adorando
aunque solo esté soñando
con tenaz perseverancia.
Cruzaré los anchos mares
en el barco de mis sueños
navegando con empeños
que me alivien los pesares.
Quizá haré mil malabares
en los mares agitados
con los lirios ya cortados
y su color blanquecino
porque amarte es mi destino
¡Son los sueños más soñados!
Si los mares no permiten
que llegue a ti navegando
seguro, me voy volando,
si tus besos me derriten.
Y si el vuelo me lo omiten
para evitar el encuentro
yo te escribo y me concentro
para enviarte humilde carta
que extendida cual pancarta
diga: ¡Vives tú, aquí adentro!