Nació de la quebrada del silencio una voz,
cuando pude probar el amargo sabor de la derrota.
Pero algo increíble pasó en el camino,
Descubrí en aquellas palabras la forma de curar mis tristezas.
Un sentimiento se cierne sobre mis oraciones,
Buscando la esperanza en aquella voz anónima
que me dicta a escribir una nueva prosa.
Mi alma poco a poco le dio forma a este elemento.
mi vida fue sanando en cada verso que escribía,
mis manos van guiándome hacia mi destino.
Me emociona cada vez que llega como una paloma blanca
entregándome una nueva oportunidad cada mañana.
Hacia que cada minuto valiera la pena sentirla, vivirla en puño y letra