Nacho Rey

TENGO HAMBRE

 

 Comencé en la hora viendo mi vida fallar,

y cada día moría, moría viéndolas pasar.

Dentro de mí no había vida y no podía esconder

ni exponer mi desnudo que a la vista debía valer.

 

 Tengo apetito por empezar mi empeño en besar

toda piel que llene mi alma de alegría y trofeo,

y lo que veo es que mi anhelo se puede triturar

en cualquier momento porque mi cuerpo es feo.

 

 Tengo ansia de poder tocar algún desnudo

las manos de gula necesidad a cada hora,

en este deseo interminable y pecadora

 

 que no para el tiempo pero que pasa cabezudo.

Aún conservo esperanza de que alguien me quiera...

por eso tengo hambre de amor, aunque sea una quimera.

 

                                            NACHO REY