Si no comprendemos que nos hacemos doler, no sigamos con el cuento de que pronto alguno va a ceder.
Son amores tercos que se dañan sin querer, es cuestion de tiempo para que se puedan comprender.
No hay que tenerle miedo si estubimos solos en algun ayer, la soledad fue pasajera y nos rendimos a sus pies. Hoy ya nos tenemos y nuevamente debemos aprender, que somos compañeros en un mismo tren .
Leandro Conte.