1
¿Sabes?, te quiero de verdad,
y el amor te hace eterna,
como las canciones del cielo,
como la luz de cada estrella.
Tú eres algo más que la vida,
si no estás, te pienso,
si estás conmigo, te sueño.
Tú me miras, y llegas a mí,
como el fluir de la primavera,
como el silencio amoroso del mar,
me besas, y simplemente, tiemblo.
¿Sabes?, sin ti, todo se va,
pero, estás aquí, a mi lado,
yo te beso, tú sonríes,
si supieras vida mía cuánto te quiero.
2
¿Sabes? te necesito,
te veo, y la vida es azul,
me miras, y todo palpita,
lees un poema, y te sueño,
me acaricias con tus alas,
y yo tus aguas tibias, vuelo.
Me siento a tu lado,
tú sonríes, me besas,
así pasa el tiempo,
¿Sabes? eres la vida,
tu calor ansioso,
tu imagen en mi alma,
tu presencia amorosa
que hace verdor y jardín,
no bastan los años del mar,
ni el aroma de la rosa,
tus labios tan míos,
tus cansancios en mi pecho,
¿Sabes? mañana harán veinte años,
y más que quererte,
te pienso.
3
A veces me detengo en el tiempo
para dibujarte con el corazón,
siento que cuando vienes a mí
baja de la luna una mirada,
tan dulce, tan enamorada,
que ilumina todo lo que siento,
cuando me besas, cierras los ojos,
y dormida entre las flores,
me dejas partir,
me oculto en la vida,
en el trabajo, en la bulla,
en la existencia anónima,
¡tan vacía!
¡tan irreal!, ¡cómo te extraño!
quiero llegar a casa,
sentir que tu calor, tus caricias,
tu cuerpo, tu voz, tu alma toda,
despiertan la alegría de vivir.
4
Tú hablas, yo viajo en cada gesto,
te miro y te amo,
me cuentas de tus cosas,
de tu trabajo, de esa pelea,
no sé con quién, te pones seria,
yo sólo sigo el volar de tus manos,
te sientas a mi lado, te acuestas tranquila,
yo te digo algo al oído,
sonríes, \"estoy cansada\"
te quedas dormida.
5
Quiero el dulce nombre en mis labios,
para refrescar el alma en tu manantial,
como despiertan las flores
en las alas del campanario,
que anuncia la mañana celestial,
en ríos de inmensos colores,
en suaves gotas del rosario,
vienen a tu alcoba a despertar,
tus ojos mágicos y embrujadores,
como luceros de giros planetarios,
que nunca dejo de contemplar.
6
Te despierto con un beso en las nubes
que nacen del misterio de nuestro ayer,
de los secretos contigo vividos,
desde el inicio de las rosas azules,
que el rocío de luces hace renacer,
cuando el calor de tus brazos y los míos,
dibujen el mismo amor que nos une,
cada vez que llega el amanecer.
7
Los besos de tu alma son eternos,
como el color infinito del cielo,
tu corazón se entrega al silencio,
que recojo en mil horas de adoración,
no sé si es cierto lo que siento,
cuando me hablas
y me miras con amor.
8
No en vano has llegado a mi vida
con esa mirada de luz y de paz,
de locura, de entrega nocturna,
con ese hablar de voces lejanas,
que navegan universos sensuales.
Te quiero, diosa de todos mis sueños,
calor entre mis venas enloquecidas.
Me acobijas con el tierno suspirar
de tu piel cubierta de flores y rosas,
que perfuman mi tormenta adormecida.
9
Cuando comience a llover,
el frío vendrá en cada suspiro,
recordarás el color de unas rosas,
tal vez, tengas miedo,
yo estaré ahí,
como una flor entres tus manos,
besaré tus mejillas,
reirás como niña hermosa,
cuando te sientas sola,
yo estaré ahí.
10
Cuando llegue la nieve,
la brisa de la tarde gris,
tendré miedo,
estarás ahí,
dirás que me quieres,
tomaré tus ojos,
me hablarás del horizonte,
dibujarás en mi alma
el tierno rugir de las olas,
dormiré en tu piel,
besarás mi frente.
11
Cuando vuelvan las aves,
con el azul del atardecer,
estaremos juntos,
bajo la palmera vieja,
la de tantos recuerdos,
brillará el lucero grande,
me iré con la noche,
cantarás de amor:
\"duérmase mi viejo\",
Y cuando llegue el sol,
no te sientas sola,
estaremos juntos,
\"buenos días, Bella Durmiente\",
caerán los años del invierno,
tú estarás conmigo,
yo estaré a tu lado,
sin adiós, sin últimas hojas,
sin lágrimas,
felices,
para siempre.