Luchar por ti no es hacerte daño, luchar es hacerte feliz, hacerte reír, disfrutar el día a día tu lado, tratarte como una Reyna, un día flores, un día restaurantes, un día hacerte la cena, un día ayudarte en la casa, un día darte besos y abrazos.
Esos días cuando no quieres estar ni contigo misma, quedarme hay apoyándote en esos días grises que suele poner la vida. Eso es luchar por ti.
Yo seré tu amigo imaginario, quien escriba para ti y aunque esté lejos hacerte sentir que tu corazón late tan rápido, porque eres la dueña de todo mi universo.