El vistoso colibrí que a los ojos embelesa
por sus tonos refulgentes de asombrosa perfección,
un regalo de natura que nos llena de sorpresa
maravilla natural convertida en bendición.
Las culturas milenarias le rendían pleitesía
en vestigios de sus vidas sus dibujos aparecen
admirados por sus vuelos de grandiosa fantasía,
todavía son actores que con magia resplandecen.
De pintores son el numen provocando el alborozo
que en sus obras se presentan de manera llamativa
y las llenan de color, manantial de inmenso gozo,
con lo trazos curvilíneos de curiosa perspectiva.
Es muy bello el colibrí, pajarillo con la magia
proveniente de su ser que ventura nos presagia.