de veras que lo intento.
Intento seguir con mi vida,
con mis amigos, con mi familia.
Pero ya no puedo soportarlo más.
Esta presión mis hombros no la pueden soportar
y a cada paso que doy, cada paso que vuelvo atrás
¿Cómo se supone que debo seguir andando si no tengo un camino,
porque a mí, mi camino, no se me aparece al caminar?
¿Cómo se supone que debo seguir soñando con cuentos de hadas
si el insomnio no me deja soñar?
¿Cómo se supone que debo seguir amando,
si mi triste y pobre corazón roto no aguanta más traiciones
ni decepciones?
Cómo se supone, vida, que lo intente una vez más