Es el amor, el sentimiento mas sublime,
cuando logras sentirlo de verdad,
no importa, sea el de madre o el de hermano,
el carnal y placentero o sea, como querer a los demás.
Después de amar a Dios, que es el eje en todos los sentidos,
cada amor es diferente en su dimensión de amar
porque cada uno, tiene su razón de porqué existe,
pero ninguno con el otro, se puede comparar.
Entre todos los amores, el de madre es el primero
porque su vida entrega al hijo, desde el momento de nacer
y lo mima y lo cuida con toda su ternura,
y su amor es tan puro que su vida da por él.
Luego el amor fraterno, que es el de hermano,
que a veces fuertes vientos los hacen separar
pero siempre existe, la fuerza de la sangre
y no son mas que nubes que llegan y se van.
También está el carnal y placentero,
el que a todos nos rinde y nos hace locuras cometer
porque a veces, te hace sentir llegar al cielo
y otras veces, te lleva al mismo infierno a padecer.
Existe otro amor que casi nunca se menciona,
que es el que se aprende y se debe practicar
que es, el darle amor al prójimo sin excepciones,
y ayudar a los caídos a levantar.
Asi es el amor, cuando de veras uno lo siente,
en cualquier dimensión, si este es de verdad
porque es sin egoísmo, todo lo que ofrece
y nunca, espera nada a cambio, de todo lo que da.