Las revoluciones de las mentes
muchas veces atormentan,
si uno no siente dentro de sí
que el camino que debe transitar
denota fuerte temperamento
y que la fragilidad,
te arrastrará hacia la tempesta.
Las revoluciones de hoy
están convertidas en placer,
en intereses puramente ambiciosos
alejados de la verdadera conquista,
tales revoluciones de las mentes,
no deben porque inquietarte,
si con ayuda, tú atraviesas
la escena y el origen que las vio nacer.
Estás a tan solo un paso,
de acercarte al amor y al bien,
¿a qué esperas
para con tu mente,
ser la propia revolución
que acabe ya con la agonía?
Algunos te seguirán,
otros ambicionaran
el revuelo,
pero, ¿qué más da,
si la fuerza siempre te acompaña?
Galilea R