Ampute la parte de mi alma que era tuya,
Te llevaste la autoestima que me construiste,
Me enseñaste a reír pero tambien a llorar.
Siendo medio hombre no pudé ser tu otra mitad
Ni pudé obligarte a recorrer conmigo el camino que lleva a mi.
corazón marchito propenso al fuego.
No soy lobo, pero aullo,
Me enamore de la luna y se llevo mi sombra.
Impregnado de olvido, ¡apesto a nostalgia!.