Creo que me estoy enamorando.
Y lo siento porque cuando él me mira se despierta mi deseo de amar; me mira y me hace añorar pasar todos los atardeceres del mundo junto a él.
Me nace abrazarlo, vivirlo. Me invaden las ganas de permanecer juntos contra el mundo en las manos de Dios.
Creo me estoy enamorando de él porque no quiero que funcione con nadie más.
Y en mi efímera vida, quiero aprender a volar con él mientras mis miedos se disipan y se vuelven sueños.
Creo que me estoy enamorando, porque con él no me importaría caminar por tierra, navegar en aguas o luchar en el aire.
A nada le temería y a todo le apostaría, si es con él.