Di tan solo una palabra
de esas que no quiera escuchar
Di tan solo mentiras mientras
en tu suspiro busque la verdad.
No te ocultes en la hipocresía,
más devuelveme a la mujer
serena y decidida.
¡Aquella que no espera de ti!
¡Decepcionalos a todos!
Comete el error
pero no de cualquier cosa.
Sé alma libre, salvaje y exponencial,
mientras alguien espera el milagro,
¡Decepcionalo!
No viniste a darle alas a nadie,
sino a sobre volar tu espíritu,
yendote lejos de aquí.
¿Entiendes qué vine a hacer?
Lo que necesito es un corazón fuerte
que direccione este hálito,
que permanezca auténtico
sin quebraderos de cabeza,
atendiendo a la sencillez
y al agradecimiento.
¡Decepcionalos!
Pero no caigas en tu propia trampa.
Naciste para brillar,
pero jamás podrás contentar
a todo aquel que te vió caer
porque ya no saben quien eres
porque solo ven
algo que jamás sintieron
y eso que sentiste ya no está.
Galiela R