Pensaba que la vida sería distinta cuando era niño, puedo creer que todos lo pensamos por lo menos alguna vez; puedo imaginar que nunca esperamos que el trabajo sería mucho más una responsabilidad sería, que cuando íbamos a clases, donde si querías no entrabas a las materias, pero eso, eso fue en el ayer.
Hoy en día pienso en cuanta disciplina y dedicación debemos tener para llevar el sustento al hogar, ¡Si! El mismo por el que trabajaba mi madre cuando mi padre por cosas desconocidas nos abandonó, ¡vaya! Si que lo recuerdo, su cara con una sonrisa y como si nada pasaba, aún sabiendo que su cuerpo estaba al colapso de un cansancio cruel, se levantaba para darnos de comer.
\"Que iluso\" ¿Pero que niño no fantasea imaginándose un sin fin de cosas? Y menos en que llegaría el momento de tener su propio hogar el cual tendría que liderar. Con todo y eso, acá está ese pequeño cachorro dándose cuenta que todo cambió, y que las cosas que el veía fácil o sencillas, así su madre, aún sin tener nada, lo cuidó enseñándole el verdadero sentido de la vida.
Ahora que tengo un hijo veo reflejada mi niñez, observo y detallo cada día sus aprendizajes, y me da un poco de nostalgia porque me fuese encantado en la vida poder tan siquiera ver, esos momentos desde mi nacimiento. En el amor inmortal que le doy a el, y en el compromiso que es enseñarle a ser un hombre de bien.
Hoy veo el ayer pensado de una manera distinta, siempre dándole amor, cariño y dedicación al hogar que el destino me obsequio, con todo y ello, no a sido nada sencillo y no lo será jamás, ese es el grandioso sentido de la vida, los espejos son solo reflejos, donde ves si actúas de la misma manera o lo ves para mejorar.
Henry Ruiz
15 DE MAYO 2021
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