Anton C. Faya

𝗘𝗟 𝗔𝗟𝗠𝗘𝗡𝗗𝗥𝗢…

 

𝗘𝗟 𝗔𝗟𝗠𝗘𝗡𝗗𝗥𝗢…


Intacta es la sombra del almendro.
Implosionan rayos de sol
y sin embargo su sombra
no es cálida ni fresca, es perfecta.  
En gris, descansa 
el infinito espíritu del mundo.

Allí duermo,
allí comienzo y también termino.
Allí nace  el revés del todo,
sin que nada se  oponga
sin que nada se  niegue.

A la sombra,
me es difícil no imaginar el presente
aunque  es  imposible describirlo,
porque no hay no, ni tampoco hay sí,
porque nada se anuncia ni nada se despide
porque siendo la nada es para mi es un todo.

Duermo a la sombra del almendro
duermo en mi hogar….

Anton.