Diegoflandes

La cruel y mágica Circe


En muchas historias, los Dioses son engañosos
Pero... seamos honestos, tan solo son historias que leí cuando niño
Y si los Dioses tienen fama de fraudulentos y engatusadores
¿Que somos los mortales? ...solo sus juguetes
No, tan solo somos la estirpe de la estupidez
Siempre listos para ser embaucados


Dioses o no, siempre hay alguien que nos verá la cara de idiotas
Pues ella, no era ninguna diosa, pero brillaba más que cualquier otra mortal
Tenia algo que jamás había visto, tenía magia
En su mirada, su boca, su andar, su cabello, en su cuerpo
Todo en ella era magia


¿Pero que diablos pasaba con sus malditos ojos?
Eran enormes, lo dejaban entrar y salir todo
Eran tan profundos como un mar de miel
Y al andar, su cabello parecía enarbolar su belleza


El sol, que salía a través de ella, era más radiante
Jamás había visto tanto brillo en alguien
Quemaba las calles, las miradas, a todos los mortales
Y su mirada... su maldita mirada de nuevo, te tragaba, te hundía profundamente


Y me sentí como un estúpido, pues si los Dioses eran cuentos de niños
¿Que diablos era ella? Y ¿Porqué los Dioses la aman tanto?
Ahora ni siquiera recuerdo, cual era su verdadero nombre
Tan solo recuerdo su magia, su cálida presencia y esos ojos violentos como mares


Tan solo...empecé a llamarle Circe, la mágica Circe
Y así... todo hacia mayor sentido, o como si hubiera alguno
Pues Circe era hija de Helios, el sol y Perseis una oceánide
Eso era todo lo que sabía y bastaba para darle sentído
Tan ardiente, profunda y mágica, pues todo eso era Circe


Cualquier hombre que se le acercará,
Era consumido por su fuego
Se ahogaba eternamente en su mirada
Lo supe, cuando yo estaba ardiendo

Era tarde para mi, Circe me había cautivado
Cuando Circe hablaba claro, yo tenía que creerle
A Circe, siempre podia creerle todo
Era Circe en lo unico que quería creer


Pero muy pocos eran elegidos por ella, por su magia
Ellos se transformaban en animales, eran solo bestias
Sin razón, ni voluntad, perdieron todo lo humano
Pero yo... bueno, yo seguía pensando


¿Porqué Circe, no me habrá elegido a mí también?
Yo era tan imbecil y podía creerle todo
Pensaba que esas malditas bestias, lucían tan felices
Y yo... yo seguía siendo un tonto humano


Al tiempo dejo de tener sentido, el creer en Dioses
Esos solo eran cuentos para niños
Tan solo, todos eran cautivados por esa mujer
No entiendo como, pero ella era especial


A menos que todos los hombres buscaramos lo mismo
Pero no todos podíamos ver lo mismo, algunos ya eran idiotas
Y aun así, algunos de ellos, pudieron probar de su magia
Yo nunca pude, yo nunca tuve opción


Todo este tiempo, tan solo fui su idiota
Pero... al menos esa sí fue mi elección
Diosa o mortal, era una mujer justa
Pues podías decidir entre ser un miserable o no


Puede ser que ella, no fuera una Diosa
Era tan humana como todas
Solo que ella, tenia algo especial
Ella... ella en verdad era mágica.