Raiza N. Jiménez E.

Para una Rosa Roja.-

Yo no sé cómo te llamas,

sí, como te haces llamar.

He visto en tus ojos flamas,

que no se quieren calmar.

***

Has escogido el de Rosa Roja.

En tu mirada se nota la pasión

y en tu corazón el amor se aloja.

No he visto en ellos la traición.

***

Mujer enigmática en esencia,

que deja su luz de Maja al andar.

Todo centellea en su presencia,

pero expresa su candor al amar.

***

¡¿Cuántos enigmas su alma aloja;

acaso su nombre es: Rosa Roja?!