Mayo, mes de las flores y de negros nubarrones
En lo extenso de la tierra feraz,
(toda la tierra en el orbe es feraz,
depende solo del esfuerzo tenaz),
resbala el sudor y llanto de Dios
que desciende a manera de lluvia pertinaz,
cuando los cielos encapotados se enternecen,
y se conduelen de la sed en los campos
después de una extensa sequía.
Se va abril en calurosa despedida
y llega mayo con agua que reverdece,
todo un Edén de plantas que florecen
choques de nubes con rayos desde arriba,
ignaro es el hombre que al bendito invierno
le llama “mal tiempo” en egoísta invectiva.
Hermes Varillas Labrador
#FormandoCiudadanía” & “#ElArcoIrisDeLosNiños