La Cucaracha
Había una vez una cucaracha muy feliz en su caminar. Cuando, de repente, se sintió floja, débil, pero, con un deseo a vivir a muerte. Ella, caminaba todas las mañanas por el viejo zaguán, el que la hacía más joven, por que aunque no crean las cucarachas también crecen y envejecen. Y un ratón la miró y le preguntó a la cucaracha que…
-“¿Oye tú, qué crees si nos vamos de “camping”...?”-,
Y la cucaracha le dice…
-“¿Y, qué es eso…?”-,
Y el ratón contento y muy feliz con todo lo que habría de tragar y zampar, sólo le dijo que eso es comer…Y la cucaracha le dice...
-“¿Y qué vamos a comer…?”-,
Y el ratón tan astuto como siempre le dice…
-“Tú no vas a comer nada, pero, yo sí…”-,
Y la cucaracha no muy feliz con el problema le pregunta que…
-“Y, ¿por qué yo no voy a comer…?”-,
Y el ratón listo como siempre le dice que…
-“Porque yo te voy a comer a tí…”-,
Y la cucaracha ni lista ni perezosa se le trepa encima y entre los dos mismos ojos y le dice…
-“A ver, ¿a quién tú vas a comer…?”-,
Y el ratón se sacude y se la come y la cucaracha le dice que…
-“Eso es trampa no hicimos el “camping”...”-,
Y el ratón le dice que…
-“Pues, yo sí y te acabo de comer, gracias…”-,
Moraleja: “No siempre el más fuerte es el más débil, ni viceversa”.