Quizá la vida es simplemente
una serie sucesiva
de imágenes desdibujadas.
Momentos de tinta
sobre un papel lleno de agua,
qué algún día
-según dicen algunos-
pasan por delante de tus ojos
antes de desaparecer.
Un último segundo,
justo antes del último
aliento.
Quizá ese segundo
y esa última respiración
es lo único
que verdaderamente
nos pertenece de este mundo.