Antonio Rodriguez Bazaga

TROCITO A TROCITO... ENTERA.

 

Empecé a quererte,

por la luz deslumbrante,

de tu infanta piel.

 

Por el cerco de tu sombra,

en la ruta irrechazable,

caminando frente a mi.

 

Empecé a quererte,

por el deslumbrante día,

de tu risa escandalosa.

 

En la apagada noche,

de satén desmayado,

después de un beso tuyo.

 

Empecé a quererte,

sobre la rica pátina,

de tu piel de impúber.

 

Naufragando cada tarde,

en el mar empapado,

por tu sal de hembra.

 

Uno a uno,

parte a parte,

empecé a quererte.

 

Y te quiero toda entera,

sin trunques que mutilen,

el cuerpo que más quiero.

 

a.rodríguez.