EL UNIVERSO DEL SUEÑO
Y... sentí que me elevaba
al universo del sueño,
volando hasta tu querencia
rauda, segura y sin miedo.
Bailaba el aire en mis alas.
Tan mágico era mi vuelo,
que iba dejando una estela
de desdenes sin remedio.
Mirabas el horizonte
como se mira un te quiero;
los ojos llenos de luna,
el alma en un puro fuego.
Sobrevolé tu sonrisa
y enredándome en tu pelo,
fui dejando en cada rizo
promesas de amor eterno.
Cuando cerraste los ojos
quizás preso de un recuerdo,
en el clavel de tu boca
dejé la miel de mis besos.