EHUR OHR

El día después de mi muerte...

Cuando todo acabe,

después del grito desgarrador de la fría parca,

cuando la desesperación cumpla su cometido…

y la impotencia lastime sin piedad…

hasta el llanto incontenible…

por la frívola presencia de la muerte,

vendrá un silencio extremo,

y una helada soledad envolverá mi tumba.

Entonces empezaré el retorno,

el viaje hacia la luz tan anhelado.

Me vestiré de claro…

y con una sonrisa afable partiré…

después de haber logrado derrotar al castigo de las tinieblas.

Me iré contento a reencontrarme con el pasado,

con aquellos que tanto amé,

con quienes tanto quise

con aquellos que añoré…y tanto deseé volver a ver.

 

Tenía la seguridad que así sería.

No miraré atrás,

y ellos, los que se quedan…

probablemente no entenderán mi ausencia,

y llorarán… desconsoladamente sufrirán,

sin siquiera imaginar que yo me iré feliz…y en paz.

 

Algún momento no muy lejano…

todos emprenderán el éxodo…

a encontrarse con la libertad…de la felicidad.

 

Parece extraño…

dejar escrito este episodio

del día después de mi muerte,

que aún no ha sucedido,

pero que sin duda es inevitable…

impredecible...se acerca… y se hace urgente.

 

Ahora entiendo todo,

la razón de todo,

el verdadero propósito de la existencia.

Puedo ver con claridad a Dios,

puedo sentir su esencia…

abrigo su presencia,

me fue revelado el secreto del entendimiento,

me fue quitada la venda de mis ojos,

hoy doy fe de su existencia.

Dios estuvo conmigo desde siempre,

desde el día en que llegue a la tierra,

hasta hoy, que he vuelto.

Todos cumplimos una misión,

y terminada la misma…

se acaba el ciclo, y punto…

punto final a este fragmento de vida.

No hay más misterio que el hecho de que todo tiene un propósito.

Pocos han logrado comprender que nuestra vida no tiene sentido si no consigues iluminar el camino de otros,

esa es la verdadera causa.

Todo está escrito,

y lo que está escrito tiene estricto cumplimiento.

Mientras unos llegan otros se van,

unos nacen… otros mueren,

y es algo que pasa todos los días,

y no debería considerarse una tragedia,

simplemente es una realidad…

donde unos te despiden…

pero otros están ansiosos por recibirte…

y darte la bienvenida.

Que cosas tiene la vida…que cosas tiene la muerte,

debería sentirme triste por dejar este mundo,

y no siento angustia,

ando feliz de ir a abrazarme con aquellos que tanto extraño.

Estoy ansioso de volver a ver a mi madre,

siento algo indescriptible,

será un encuentro deseado…por más de 40 años.

Que otra cosa más sublime puede haber que un niño abrace a su madre después tanto tiempo,

seguramente haremos una fiesta.

Ya no tengo temor,

mis dudas se desvanecieron…

y me siento preparado.

Se ha de cumplir la voluntad del Eterno.

No lloren por mi…

lloren por ustedes que aún tiene que derrotar sus miedos…

y allanar el camino tortuoso y largo hasta encontrar la luz.

Yo siento haber cumplido mi misión… y retornaré al paraíso.

 

Hasta siempre…nos volveremos a ver allá en la gloria.

Pero si por un acaso…aún hay algo pendiente en mi misión,

no duden que se suspenderá el viaje…

y seguramente nos volveremos a ver... mañana muy temprano…

el día después de mi muerte.