Palpita mi vida en los suspiros de la incertidumbre,
vibrando constante en el deslumbre de la luces como relámpagos andantes en tormentosas odiseas.
Cada noche es la misma bajo los mantos de la lluvia, granizando los nervios con despertares y recuerdos,
continuos despertares hacen que los sueños azoten mi alma con el fulminante flujo de la sangre.