En los profundos fondos de los Mares…
En los incendios y carbones candentes, encendidos
En un arroyuelo puro…
En el verde de alguna Primavera---
Escribiré sin vacilar
mi Nombre…
Inscripto estará
Que ignoro el sentido de lo Humano…
Que ignoro la sed y el hambre de un estío…
Y esa alegría de ver un alba naciente
De los Otros.
Vaciedad Eterna
y brevedad de un instante del Día
Que ya sin lágrimas , no lloro…
Que se inserta somnolienta
Por las noches
En Polvos cenicientos
Del ilusorio Orbe
que rompe en pedazos los Espejos…
Y en las brumas negras los despojos
Del cóncavo Universo que muere
Y que menguante
se diluye en lo Mellado y en lo Incierto…
Ése Orbe sin alas que me ha sido
Asignado
Ése, gélido y frío
de atormentados martirios y luchas
Que yacen siniestros
agazapados
En algún hueco sólo por mí
conocido…
Tiempos raros que conozco
En dolor presente y bamboleante
Que me parte por veces fulminante
En miles de fragmentos
Y sin Rostro….
Este frío de Alma y de Huesos
Se yerguen enhiestos
Y a la vez
Yacen perennes
En la mercedaria Muralla
de Arenas que declinan.
En las extrañas Rocas
De fraguados cristales que el Tiempo encierra..
Y en la Materia deleznable…
De mis días…
(Patricia)