Te voy acariciando en cada letra
desnudándote inquieta con mi verso,
recorriendo, amando tu ritmo terso
en tanto el tiempo... no nos cronometra.
-Cuidado cuando la pluma penetra-,
sugieres al sentir el universo,
mas simplemente me porto perverso
y por completo, mi éxtasis perpetra.
Y me susurras mordiendo las hojas,
cómplice, como la primera vez
que me obsequiaste tachaduras rojas.
Y así, en el sudor de nuestra embriaguez
mi aliento y mis energías despojas
perdiendo juntos nuestra lucidez...
Amando tu inspirada melodía
entre flores rozando tu cintura
conocí rincones de tu estructura
para desparramar lo que me urgía.
Amándote en la simbionte utopía,
escrita en ti, mi firma que perdura
te entregas siempre nueva, con frescura
para que sepan todos que eres mía.
Con caricia rimando tus oídos,
busco susurrarte en tu punto G
para sincronizar nuestros latidos.
En las líneas que en ti imaginé
encontré diversos ritmos prohibidos
gracia, gloria y grandeza que busqué.
Tu cuerpo con las medidas perfectas
se acomoda al ímpetu de mi pluma
y en cada intento que mi piel arruma,
tú, nuestros albores los recolectas
Con tu fragancia y mis ansias erectas
dejamos que el sudor se nos consuma
y que la noche inquieta se resuma
en el surco de nuestras indirectas
A veces doblegado, otras encima,
me otorgas derramar cada secreto,
pa´ escalar cómplices hasta la cima.
Y así, tu esencia con verso someto...
terminando el clímax de nuestra rima,
dormimos juntos en cada soneto.
...s. ....l