“En tus aguas me consagro . . .”
Después de normal trayecto,
del remanso circunspecto,
Río “El Milagro” sigue curso
con vigor retoma impulso.
Desatado, hasta imprudente,
llega a empinada pendiente
transformándose en cascada
ligerita enamorada.
Que se arroja en forma libre
dando un salto como liebre,
símil de ducha, torrente
de emociones recurrente.
Cascadita candorosa,
lluvia de cristal que roza
en su descender las minas,
geositios de rocas finas.
Cascadita apasionada
luce bien aprisionada
entre murallas de piedra
que se adornan con la hierba.
Linda tal caída de agua
donde ecología se fragua
con claridad transparente,
naturaleza inmanente.
Trenza “chorritos” acuosos,
hilos cortos primorosos,
bajo ley de gravedad
cortinas de liviandad.
Que sonorizan destinos
de espirales remolinos;
ahí la existencia anida
salpicándonos de vida.
Con sus infinitas gotas,
fragmentadas linfas rotas,
cascadita duradera
es de Dios . . . su regadera.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Río “El Milagro”, Municipio de el Mineral del Chico, Estado de Hidalgo, México, a 19 de junio del 2021
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