Miguel de Cervantes o el manco de Lepanto, con una sola mano escribía que daba espanto Miguel de Unamuno escribía como un ángel, lo desterraron a Fuerteventura evitando la cárcel Miguel Hernández poeta y pobre que tuvo una joya, desde la cárcel a su niño le escribió la nana de la cebolla Miguel Miura escribió Ninette y un señor de Murcia, más que señor señorito y ella no era una furcia Miguel Delibes autor de la sombra del ciprés es alargada, como el amanecer lento de la madrugada Miguel Servet cristiano enemigo de los dogmas, fue quemado vivo en Ginebra porque criticó las inútiles reformas Servet no creía en el dogma de la Trinidad, porque pensaba que era un disparate lejos de la verdad