Hoy se bien que jamás amaste a nadie,
hoy se bien que no piensas más que en ti
que ti juez y tu dios es el espejo
que ti ley y tu credo ¡recibir!
Hoy se bien que eres un “aujero” negro,
fagocitas cuanto se acerca a ti
un vacío infinito, una entelequia
un desieto, un páramo sin fin,
un mar muerto de pútridas corrientes
un cementerio, un charco, un muladar,
un firmamento sin luna y sin estrellas
un calendario sin hojas que arrancar
Pretendí con mi amor borrar tu orgullo
Compartir nuestras vidas y trazar
Una senda de manos enlazadas
Un nosotros donde vivir en paz,
Te entregué alma, vida y pensamiento
mas al cabo, mi intento fracasó
fue violento el combate, pero al punto
tu egoísmo venció, mi amor murió
en la arena mortal de tu pantano,
en las espinas de tu rosal sin flor.