Andando en busca de un aire refrescante
el ocaso desapareció agobiante
el olfato captó el aroma de amor
y en sus ojos vieron lindeza primor
No hubo palabras más algo floreció
y entre gotas de rocío por la noche
el cielo con sus sábanas los cubrió
besos en la playa y un solo derroche
Hasta que nació la luz de un nuevo día
con pasos de agigantados se marchó
satisfecha de placeres se alejó
sin dejos de tristeza solo alegría
Tampoco hubo palabras nadie medió
el aroma del amor desvaneció
el nuevo día amaneció refrescante
se alejaron sin olfacción al instante