En el tiempo del olvido
está tu dulce recuerdo,
que se escapa del silencio
y se transforma en suspiro;
y aunque pervive de un hilo,
tras de un constante desvelo,
me repite como un eco
que por siempre está conmigo;
y yo lo tomo en mis manos,
con un dejo de nostalgia,
como eterno enamorado;
eres mi aliento y mi calma,
mi dulce amor, mi regalo,
que del olvido se escapa...