Te veo semidesnuda
Vertiendo lluvias frías
Que nacen de tus ojos ciegos
Y que abrazan la amargura.
Tu entorno entre derrumbes
Nos colma de grandes espinas
Que se anidan en el alma
Y nos llena de agonía.
Sueños simples de ciudadano
Ver tu cuerpo en combustión
Ser feliz, aunque sin caudal
Y con todo racional.
Incluso en la necesidad
Y ya contra la pared,
Sigue tu apariencia en pie
Y yo sigo amándote más.
Con esperanzas infinitas,
Las discusiones estériles acabarán,
Y tendremos un poco de paz.
Y te amaré, mucho más.