Los años han pasado, ya no buscas un héroe, ahora necesitas un protector
La fantasía no causa curiosidad en tu percepción, te interesa acercarte a la realidad
Lo entiendo, pues comprendo el significado al mudar la piel
Sería arrogante si nos preguntaran si maduramos y la respuesta fuera una afirmación
Sé que aún gustas del azúcar y su dulzor, es inocultable el deseo de una mañana melosa
Un caramelo no estaría mal para apagar un poco nuestra amargura
El azúcar me provoca un recuerdo, ¿Será que era dulce el amor?
Quizás el empalagamien no nos haría sentir peor que un ácido atardecer en soledad
Mentirías si juraras que olvidaste aquel dulzor de placer y bienestar
Siempre necesité azúcar para andar, ¿Será que es dulce el amor?