Herencia alcalina
Siempre serás mi herencia alcalina por como te haces eterna en cada espina de mi piel, así te recuerdo cuando cada latido tuyo atraviesa el templo de mi pecho y recibo tu corazón certificado en un código postal llamado amor.
Es inevitable escribirte un poema cada vez que Diego Ojeda suena por la radio, o en aquellas lecturas de Marwan que rememoran todos los maratones de besos furtivos que deseo darte en todas mis vidas.
Tienes el arte de coser mis cicatrices, por ello soy asiduo a la mercería de tus dedos, tus besos me hacen sentir el cambio climático dentro de mi cuerpo y sabes derretir todos mis glaciares apagando nuestros incendios con gasolina.
Algunos se matan con drogas, otros con alcohol y yo matándome en cada una de tus jodidas curvas del Km 0, hasta me place envenenarme de un café endulzado con tus ojos, de algo hay que morir y acepto que así sea, pero eso si, contigo.
Nada es para siempre pero mientras viva, recordarte será infinito.
Jordi Etresi
-© Copyright 2021
-Todos derechos reservados