Gastada esencia de la melancolía.
Sensaciones que va quemando la piel
de un hombre que ya puede muy poco
y que sus fuerzas solo radican
en el anonimato.
Un tiempo para pensar
y comprender que los ojos no mienten.
Un tiempo para entenderme
y lograr someterme a lo que quiero
y no me animo.
Corazón acorazado que solo existe
para saciar la sed que siento
de una sola libertad
que es la nuestra.
Entrada la noche
donde la suavidad del tacto se hace presente
solo queda saborear en fracciones
los restos de todas tus emociones.
Caen las nuevas figuritas
del álbum mas recóndito e imperfecto
tu haces de la simpleza
algo cotidiano.
Aquellos pies
mojados en la arena de la rambla
allí donde el mar se hace lluvia
que moja tu cuerpo y el mío
allí todo desaparece.