La soledad queriendo tocar mi puerta,
y yo diciéndole que soy mi mejor compañía,
no importa quedarme solo,
un poco de sexo de vez en cuando,
remediaría mi dolor,
y si no hay sexo,
espero que haya mucha hierba,
un esfero y un cuaderno,
porque aparte la soledad te atropella,
y a veces quiero escribir,
cuando la melancolía
toque la puerta diciendo que quiere entrar,
escribiré con ella,
viendo a la luna,
viendo a las estrellas,
tratando de sacar algo que llevo dentro,
un vacío que no se hace notar,
solo de vez en cuándo,
y mientras escribo,
no escribo para nadie,
solo para mi soledad,
y tal vez para el amor que he perdido...